La gravedad es el origen de la ligereza,
La Calma, la dueña de la agitación.
Así pues, el que dirige una gran empresa
no debe actuar con ligereza o agitación.
Actuando a la ligera, pierde contacto con el Mundo,
Actuando agitadamente, pierde contacto consigo mismo.
El sabio viaja todo el día sin perder el control;
Rodeado de cosas deseables, permanece en calma y sin sujecciones.