Conociendo lo masculino, y convirtiendose en lo femenino,
Se llega a ser la vía a través de la cual se mueve el Mundo,
Estar unido a la virtud,
Y renacer de nuevo.
Conociendo la luz y convirtiendose en la oscuridad,
Uno se convierte en el Mundo,
Llegando a ser la virtud,
Y volviendo al Tao.
Conociendo el honor y siendo humilde,
Uno se convierte en el valle del Mundo,
Llenandose de la virtud,
Y siendo como un tronco no cortado.
Cuando el tronco es cortado se convierte en herramientas.
Usadas por el sabio, son poderosas;
Así pues, un buen carpintero no desperdicia madera.