AGRADECIMIENTOS

Como ya hice en libros anteriores, quisiera agradecer la ayuda de una larga lista de personas entre las que destacan, muy especialmente, Lin Huiying, célebre diseñadora de vestidos mandarines en Shanghai, por sus expertas explicaciones; Patricia Mirrlees, amiga a la que conocí hace veinte años en Pekín, por su continuo apoyo durante todo este tiempo; y Keith Kahla, mi editor en St. Martin's Press, por su extraordinaria labor.

Загрузка...