TEXTO COMPLEMENTARIO 1
UNA CARTA A DIOS
Lencho era una persona que creía mucho en Dios. Tenía una familia numerosa y pasaba los días trabajando un pequeño campo en arriendo. Un día empezó a llover y a granizar. El granizo estropeó completamente la cosecha de maíz. El pobre Lencho no sabía a quién pedir ayuda para alimentar a sus hijos. Pasó toda la noche sin dormir. A la mañana siguiente escribió una carta. Era una carta a Dios. En la carta le escribía: «No tenemos que comer, mis hijos se morirán de hambre. Necesito 100 pesos para volver a sembrar las tierras. Mándamelos en seguida».
Puso la siguiente dirección en el sobre: A Dios. Y echó la carta al buzón.
Cuando el cartero leyó la dirección se echó a reír, y mostró la carta al jefe de Correos. Este, que era una buena persona, se compadeció del pobre campesino y decidió ayudarle, enviándole 60 pesos que recogió entre los empleados. Los metió en un sobre poniendo en las señas del remitente sólo una palabra: Dios.
Pocos días después recibieron otra carta, también dirigida a Dios que decía: — Dios: Del dinero que te pedí sólo llegaron a mis manos 60 pesos. Mándame el resto del dinero, pero no lo mandes por correo porque los empleados de allí son muy ladrones.
Vocabulario
creer верить
campo en arriendo арендованное поле
granizar идти (о граде)
el granizo град
alimentar кормить
necesitar нуждаться
sembrar сеять
morirse de hambre умереть с голоду
echarse a reír расхохотаться
compadecer, -se de пожалеть кого-нибудь
el resto остаток
el ladrón вор