En primer lugar, muchas gracias a Mogwai, cuyo disco Stanley Kubrick tuve como música de fondo durante la redacción final del libro.
El libro de poemas del piso de David Costello es I Dream of Alfred Hitchcock, de James Robertson, y el que cita Rebus se titula Shower Scene.
Después de la primera redacción del libro descubrí que el Museo de Escocia encargó en 1999 a dos investigadores norteamericanos, el doctor Allen Simpson y el doctor Sam Menefee de la Universidad de Virginia, el examen de los ataúdes de Arthur's Seat para que emitieran un dictamen, y éstos llegaron a la conclusión de que la explicación más verosímil era que fuesen obra de algún zapatero conocido de los homicidas Burke y Hare, que los había hecho con una lezna y con bisagras de latón procedentes de hebillas de zapato con el propósito de dar a las víctimas un simulacro de sepultura cristiana, dada la creencia de que a los cuerpos sometidos a disección les estaba vedada la resurrección.
Naturalmente, Aguas turbulentas es una obra de ficción totalmente imaginaria y el doctor Kennet Lovell sólo existe en sus páginas.
En junio de 1996 hallaron en la cima del Ben Alder el cadáver de un hombre muerto como consecuencia de unos disparos, cuyo nombre era Emmanuel Caillet, hijo de un banquero francés. Se ignora qué hacía en Escocia y, aunque según el informe de la autopsia, basado en los indicios del escenario del crimen, el joven se había suicidado, había discrepancias y detalles inexplicables que inclinaron a los padres a no aceptar tal conclusión.