Favoritos de la fortuna, sin ser la última obra de la serie, marca el final del período de la historia de Roma en que las fuentes son escasas por no contar aún con la obra de Tito Livio y Dión Casio, y no digamos Cicerón, el más prolífico. Efectivamente, esta circunstancia ha motivado que en los tres primeros libros haya podido abarcar casi todos los acontecimientos históricos de un extremo a otro del Mediterráneo. Por ello, Favoritos de la fortuna es también un punto de inflexión en el tratamiento del tema de mi obra, que es la caída de la república romana. Los libros que seguirán estarán centrados en aspectos más limitados de la historia general de la época, creo que para mayor ventaja de lectores y autor.
No obstante, también Favoritos de la fortuna se ha enriquecido con ese aumento de las fuentes históricas, como son la aparición de dos animales en el relato, el perro del rey y la reina de Bitinia y la famosa corza de Sertorio, los dos documentados. el perro por Estrabón y la corza por Plutarco.
Favoritos de la fortuna se aproxima, además, a un período de la historia de Roma en el que Hollywood ha hecho sus incursiones en detrimento de la Historia, cuando no del propio Hollywood. El lector hallará una versión muy distinta de Espartaco a la que se da en el film. No dispongo de espacio ni de ganas para explicar por qué he optado por retratar a Espartaco del modo que lo hago; los eruditos deducirán del texto los motivos que a ello me han inducido.
El glosario ha sido totalmente revisado para esta tercera obra y de él han sido eliminadas entradas como «hierro» y «vino». Con forme avanza la obra, habría tenido que aumentar el tamaño del mismo si no seleccionaba las entradas, y el tiempo y el espacio descartaban la imposibilidad de ofrecer un glosario más largo que la obra.
Señalaré a los lectores interesados, que los glosarios de los volúmenes anteriores, unidos al de éste, procuran una amplia información sobre casi todos los temas. En él se incluirán siempre las entradas de vocablos relativos a la estructura de la Roma republicana, aunque modificados con arreglo a los cambios de legislación sobrevenidos en el contexto del relato histórico. Las entradas más interesantes son las relativas a embarcaciones, que a partir de ahora cobran mayor importancia, por lo que en el glosario de Favoritos de la fortuna se han incluido términos como «birreme», «trirreme», «hemiolia», «mercante», «myoparo» y «qqinquerreme».
Para solventar dudas de los que puedan sorprenderse porque las cartas de Pompeyo al Senado difieren mucho del texto de Salustio, y porque los breves discursos de Cicerón se apartan notablemente de los textos publicados que han llegado hasta nosotros, diré que existen bastantes dudas sobre la autenticidad de la correspondencia de Pompeyo recogida por Salustio y que Cicerón reescribió sus discursos para publicarlos. En el tema de los elefantes, téngase en cuenta que los romanos conocían el paquidermo africano, no el de la India, y que la especie africana era de mayor tamaño y menos amaestrable.
Los que quieran conocer la bibliografía pueden dirigirme la correspondencia a la sede de mis editores.
El título del próximo libro será Las mujeres de César.