LA GRACIA

A Amado Alonso.


Pájara Pinta

jaspeada,

iba loca

de pintureada,

por el aire

como llevada.


En esta misma

madrugada,

pasó el río

de una lanzada.

La mañanita

pura y rasada

quedó linda

de la venteada.


Los que no vieron

no saben nada;

duermen a sábana

pegada,

y yo me alcé

con lucerada;

medio era noche,

medio albada.

Me crujió el aire

a su pasada,

y ella cruzó

como rasgada,

por cara y hombro

mío azotada.


Pareció lirio

o pez-espada.

Subió los aires

hondeada,

de cielo abierto

devorada,

y en un momento

fue nonada.

Quedé temblando

en la quebrada.

¡Albricia mía [7]

arrebatada!

Загрузка...