IX
—Hércules Poirot.
Hércules Poirot prestó juramento, se retorció el bigote y esperó, con la cabeza inclinada a un lado. Dio su nombre, sus señas y su profesión.
—Monsieur Poirot, ¿reconoce usted este documento?
—Ciertamente.
—¿Cómo llegó a poder de usted?
—Me lo dio la enfermera del distrito, miss Hopkins.
Sir Edwin dijo:
—Con su permiso, excelencia, voy a leer esto en voz alta y luego puede ser entregado al Jurado.